Hemerocallis doble
·
Familia: Liliáceas.
Género: Hemerocallis.
· Especie: Angiosperma, plantas con flores y frutos
con semillas.
· Origen: nativas
de las regiones templadas de Asia oriental.
· Magnitud:
de 50 a 70 cm . de altura. Diámetro
indefinido, se reproducen fácilmente por su sistema radicular de rizomas
(raíces engrosadas).
· Follaje: perenne,
hojas lineares, lanceoladas, de textura media y color verde medio.
Floración: sus
flores están formadas por 6 piezas indiferenciadas, (no son pétalos ni sépalos)
se denominan tépalos. Florecen desde la primavera, durante el verano e
incluso hasta prinicipios de otoño, teniendo un largo período de floración.
Cada flor se marchita al llegar el atardecer y es reemplazada por una nueva al
amanecer, es por eso que comúnmente, se la conoce con el nombre de “flor
de un día”. Tienen una vibrante gama de colores que pasan por diferentes
tonalidades de los amarillos, naranjas, rosa, rojo y púrpura. Son flores
grandes, vistosas y actinomorfas (de simetría radial).
·
Exposición
solar: pleno sol, media sombra.
·
Clima: toleran
muy bien el frío.
·
Suelo: rico
en materia orgánica, suelto y bien drenado. Requiere riego frecuente.
·
Multiplicación:
por división de matas en otoño o primavera. Es recomendable dividir las matas
cada 3 ó 4 años.
·
Usos y
valor ornamental: es una de las herbáceas perennes más utilizadas en
paisajismo y en la jardinería, por su largo período de floración, sus vistosas
y coloridas flores, sumado al escaso mantenimiento que requieren. Ideal para
formar arriates florales, para combinar con diferentes tipos de arbustos, para
la formaciòn de macizos y borduras. Se adaptan perfectamente al cultivo en
jardineras y contenedores como así en jardines. Los Hemerocallis, son de bajo
mantenimiento, más que cortar las varas florales secas y sus hojas secas.
·
Nota:
muchas especies del género de Hemerocallis son comestibles, en los mercados
asiáticos se vendren tanto frescas como secas, denominándolas “agujas
doradas”, se utilizan en sopas y en un plato de cerdo moo shu. Además la
medicina tradicional asiática, les atribuye propiedades analgésicas, a tallos y
raíces. Estudios recientes de la variedad “Kwanso” han desvelado la existencia
de ciertos compuestos anti-tumorales, que han sido probados con eficacia en
humanos.
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